El arte de encontrar inspiración (offline)
Algunos tips para buscar inspiración fuera de Pinterest
¿Se acuerdan de que en en el artículo anterior hablamos sobre el content curating y cómo podemos consumir conscientemente el internet? Si bien, este hábito transforma nuestra experiencia digital, en esta ocasión me gustaría que hablemos de toooda esa magia que existe fuera de la blue screen.
Empiezo fuerte con una confesión; he notado que me cuesta muchísimo estar en silencio. ¿A alguien más le pasa?
Esos espacios en los trayectos al trabajo o a casa, durante el día, fuera de las conversaciones, siempre intento llenarlos con algún sonido de fondo: pongo videos, música, podcasts o series. Según yo, consumo todo esto para mantenerme “inspirada”, pero es una mentira enorme. En terapia entendí que este hábito de llenar cada momento con ruido es una forma de evitar estar a solas con mis pensamientos.
Mi cerebro se ha engañado ya por mucho tiempo con esta idea, por eso, mientras escribo esto, estoy intentando hacerle entender que no siempre tiene que estar inspirado, que hay momentos que requieren silencio y que bajar el volumen de mis pensamientos no significa ignorarlos.
Intentando encontrar soluciones, volví a mi versión del 2020, que más que obsesionarse con el mundo digital, le encantaba conectar con la naturaleza, pintar, leer y observar. Quiero reconectar con ella y con todo aquello que la hacía sentir físicamente presente.
Todo esto lo escribe la fan #1 de Pinterest, la que esta app ocupa más de la mitad de su screen time cada semana. Si bien, soy consciente de que todas estas herramientas digitales como los moodboards y tableros nos mantienen estimuladxs para crear, estoy en un punto en el que siento que necesito un equilibrio. Quiero encontrar inspiración en el mundo real, en las pequeñas cosas del día a día, y aprender a disfrutar del silencio y la tranquilidad sin sentir la necesidad de llenarlo todo con ruido constante.
Chase real dopamine. Sun. Ice. Sauna. Weights. Run. Walks. Hard work. Breathwork. Meditate. Visualize. Design. Serve. Connect. Create. Sprint towards your future self. Do real work. You´ll never reach your potential if fake dopamine is always within reach. — Zach Pogrob.
Aquí van algunas ideas que me han estado ayudando (y otras que quiero poner en práctica as we speak) para encontrar inspiración fuera del internet:
La pluma y el papel
Escribir en papel, pintar en lienzos, mancharse, equivocarse y no poder darle control z. Combinar técnicas y disfrutar del proceso creativo sin la presión de la “perfección” digital. Si bien, no soy tan fan del journaling (lo he intentado varias veces), quiero explorar nuevas formas de hacer tangibles mis pensamientos. Creo que la clave está en encontrar una actividad que nos permita conectar con nuestras emociones sin la necesidad de alcanzar la excelencia en tooodo.
Las exposiciones y los museos
Visitar exposiciones y museos para empaparse de arte e historia. Pienso que la creatividad y el talento de otras épocas, culturas, expresiones, movimientos y arquitecturas son una de las fuentes de inspiración más lindas y honestas con las que podemos conectar.
Explorar nuevos lugares
Mantener nuestra mente curiosa y ocupada descubriendo nuevos lugares. Para nada es necesario viajar a otro país o continente; salir a la caminar, conocer nuevos cafecitos, restaurantes, parques cerca de casa, pasear por carretera, también cuenta. Explorar diferentes culturas, paisajes y experiencias, incluso en nuestro entorno cercano, puede despertar nuestra creatividad de muchas formas.
Observar (people watching)
Las interacciones y comportamientos cotidianos son interesantísimos y pueden dar lugar a nuevas ideas. Observar -sin juicios- y apreciar los pequeños detalles de la vida diaria nos permite descubrir nuevas perspectivas y encontrar inspiración en lugares inesperados.
Lo cotidiano tiene una magia especial y es un talento humano que nos conecta con el mundo de una manera única. Desde las conversaciones casuales hasta los outfits, las voces, los acentos, los gestos y expresiones de las personas a nuestro alrededor, todo puede ser una fuente de creatividad y comprensión. Es en lo simple y en lo común donde a menudo encontramos las conexiones más profundas.
La cocina
Explorar sabores, olores, texturas, nuevas ideas y procesos. Cocinar es una actividad interesante que estimula todos nuestros sentidos. Me lo apunto mentalemnte para probarlo pronto.
Print media
¿Te acuerdas de la primera revista PorTi, TÚ o Bop que tuviste en tus manos? ¿Del primer póster de JB o 1D que pegaste en tu cuarto? ¿O del álbum de fotos familiar que pasó de mano en mano entre todos lxs invitadxs durante aaaaaños?
El formato físico de las revistas, fotos, periódicos y otros medios impresos tiene una magia única que no se puede replicar en lo digital. Hay algo especial en pasar las páginas y sentir la textura del papel. Los colores vibrantes del CMYK, la calidad de las fotos y la sensación de los materiales nos conectan de una manera más profunda y personal con el contenido.
En un mundo cada vez más digital, valoremos la profundidad y la conexión emocional que nos ofrecen estos objetos que son portadores de historias y recuerdos.
Concept stores
Visitar tiendas conceptuales y observar las propuestas visuales, la curaduría, las piezas, los objetos, y la gente que las visita (again, people watching). Estos espacios tienen una energía creativa por naturaleza. Dejarse inspirar por el ambiente, las combinaciones inesperadas y las historias detrás de cada objeto es una experiencia creativa que se siente fresca y que cieeeen recomiendo.
Ejercicio al aire libre
Practicar ejercicio al aire libre es perfecto para despejar la mente y conectar con la naturaleza. Caminar, correr, pasear a nuestras mascotas, todo ayuda. No solo liberamos endorfinas, sino que también nos anclamos en la realidad, nos trae al presente y nos inspira. Además, nos ayuda a ordenar nuestras ideas y a evitar el famoso overthinking que nos tiene cansadxs.
Imprime tus fotos y decora tus espacios con esos recuerdos
Mi favorito. Esos recuerdos se transforman en algo tangible, nos ayudan a mantener presente que nuestro día a día, tal como lo vivimos ya es creativo, y que es real. Sobre todo, nos recuerda que no necesitamos buscar una vida que se parezca a la de alguien más en internet. Amoooo.
Leer en físico
Por último, un básico que nunca falla: leer libros en papel. Animarse a descubrir autorxs diferentes, de otros países, en otros idiomas y de otras culturas. De vez en cuando, salir de nuestra zona de confort y explorar géneros que no solemos leer nos ayuda a desconectar del mundo real, y eso, de vez en cuando, es muuuuy necesario.
Hace poco vi este reel que dice que nuestro propósito al leer no debería ser volvernos más listxs o cultxs. Más bien, debería inspirarnos a emocionarnos por cosas normales, por los pequeños actos, momentos y rutinas.
Gabby Fenimore cuenta cómo en "Normal People" de Sally Rooney leyó la palabra "toast" mil veces, y esto hizo que se quedara en su mente. La inspiró a prepararse tostadas para desayunar de formas súper creativas. Lo mismo le pasó con la miel; después de leer una historia similar, empezó a idear nuevas recetas donde la miel se convirtió en el ingrediente estrella.
La lectura nos ayuda a darles más valor a estos cachitos de vida, y a apreciar lo cotidiano de una manera diferente. Para mí, es como si cada página nos recordara que hay belleza en lo simple y que cada detalle cuenta.
Por último, les comparto una galería de momentos que me han inspirado últimamente :)
Gracias por llegar hasta aquí. Espero que este contenido les despierte las ganas de salir a buscar inspiración fuera del internet y les acompañe en estos días de primavera.
También, espero que recuerden que está bien no sentirse inspiradx o motivadx siempre. Es parte del proceso de crecer y cada día es una nueva oportunidad para encontrar magia en los pequeños momentos.
Les mando mucho amor.
D,
quedé enamorada de las fotos y del formato. Siento que lo hace más memorable 🥰🥰
Omg qué lindas fotos